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Estimados compañeros y camaradas preocupados por la seguridad de vuestros familiares:
Hoy, nos ha llegado esta noticia a nuestra Redacción, por parte de una camarada en la clandestinidad, "La Infiltrada", se hace llamar. ¿De qué nos informa ella?
Nos dice que, en una de las provincias catalanas (Barcelona), en el municipio de Premiá de Mar, hay un Salón del Reino de los Testigos de Jehová que no cumple con los requisitos en materia de seguridad, como lugar de reunión pública que es.
Según nos cuenta, la única salida de emergencia que tiene el local, da al interior del edificio en el que está ubicado..., parece ser que a un vestíbulo. ¿Si, desgraciadamente ocurriese un incendio, correría peligro la vida terrenal de los asistentes..., aunque tuviesen garantizada vida y parcela en el Nuevo Orden Watchtoweriano? ¿Hasta qué grado es importante la seguridad de los asistentes a estos actos religiosos, independienmente de la religión que sean? ¿Te gustaría a ti, que, tu hijos se reuniesen en un local en el que en caso de emergencia fuese una ratonera? ¿Quién no recuerda la tragedia de Alcalá 20..., entre otras? ¿Es normal que, nosotros, los ultra apóstatas ibéricos y allende los mares, nos preocupemos por la vida y la seguridad de los testigos de Jehová..., a pesar de que no somos nosotros los que se benefician de sus contribuciones monetarias? ¿Quién, obligatoriamente, debería preocuparse de que los hermanos pudieran reunirse en un lugar adecuado y con todas las garantias de seguridad para sus vidas? Si sucediese alguna tragedia --¡Dios no lo quiera!--, ¿de qué valdrían los lamentos posteriores? No podemos olvidar el dicho: "¡Una vez muerto, la cebada al rabo!".
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