John Henry Kurtz (JHK). Con la tecnología de Blogger.
Mostrando entradas con la etiqueta Abusos sexuales infantal. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Abusos sexuales infantal. Mostrar todas las entradas

sábado, 29 de octubre de 2016

Comisión Real Australiana: resumen sobre los abusos sexuales infantiles (II)



     Estimados compañeros de conventículo:

     Estamos en la segunda entrega. Desde este púlpito virtual, he intentado hacer un seguimiento de la Real Comisión Australiana para una respuesta institucional a los abusos sexuales infantiles. Concretamente, desde el 27 de julio al 14 de agosto de 2015 estuvo enfrascada con la confesión religiosa de los testigos de Jehová. Se entrevistó a víctimas, peritos y también a los pesos pesados de la dirección nacional de la entidad religiosa en ese país... incluyendo --insólitamente y por primera vez-- a un miembro del Cuerpo Gobernante, Geoffrey Jackson. Dicha comisión investiga los presuntos casos de abusos sexuales a menores en el ámbito de la confesión religiosa y el protocolo que sigue dicha organización religiosa en estos casos. El abogado del Estado, Angus Stewart, sacó los colores a Terrence O'Brien y a Geoffrey Jackson, quedando éstos como Cagancho en Almagro... ¡llegué a sentir vergüenza ajena, que ya es decir!
http://johnhenrykurtz.blogspot.com.es/2016/09/comision-real-australiana-resumen-sobre.html

     El informe del Sr. Angus Stewart, tiene una extensión de 132 páginas. En la primera entrega abarcamos las primeras 22 páginas. Para poder leer íntegramente el texto y en su idioma original, podéis visitar el siguiente enlace, bajo Submissions of Senior Counsel Assisting the Royal Commission, cuya primera página está colgada arriba:
http://www.childabuseroyalcommission.gov.au/case-study/636f01a5-50db-4b59-a35e-a24ae07fb0ad/case-study-29,-july-2015,-sydney.aspx

     Después de este preámbulo teocrático, podemos entrar en materia. Antes que nada, advertir al lector que su fe ciega en el paniaguado y pedigüeño Cuerpo Gobernante puede verse comprometida. Ante la imposibilidad de traducir íntegramente el documento, se traducirá lo más significativo, por eso aconsejo que se coteje con el original. El Topo Ajalvireño --a quien le estamos inmensamente agradecidos--, nos hará de traductor apóstata. Él se encuentra en paradero desconocido. Se dice que está oculto en las madrigueras del páramo ajalvireño. Sobrevive como Nabucodonosor, comiendo hierbas del campo. ¡Es que el pobre tiene miedo a que los agentes Watch lo cacen y le den su ración de pelargón. Así, sin más dilación, entramos en materia. ¡Va por ustedes!

Parte 3 - Histórico sobre políticas y protocolos

68  En términos generales, los presuntos casos de abuso sexual infantil fueron gestionados en los períodos pertinentes de la misma forma que cualquier otro pecado de acuerdo a un sistema que exige que los pecados graves sean denunciados ante los ancianos de la congregación. Entonces los ancianos investigarán con el objetivo de determinar la veracidad de la denuncia. Si una denuncia resulta probada según los estándares de las Santas Escrituras, entonces los ancianos formarían un comité judicial para determinar el grado de arrepentimiento del acusado y el tipo de sanción estipulada. 

3.1 - Documentos clave, políticas y protocolos en 1989 y 1992

69  En 1989 y 1992, los ancianos de los testigos de Jehová que se encargaron de gestionar las acusaciones de abuso sexual infantil a las víctimas BCG y BCB tuvieron que regirse por las políticas y protocolos establecidos en el manual para ancianos Presten atención a sí mismos y a todo el rebaño, ediciones de 1981 y 1991 respectivamente. Estos manuales dirigidos a los ancianos de tanto en tanto eran complementados por cartas remitidas por la sede nacional que contenían directrices sobre cómo aplicar los principios bíblicos y protocolos, así como por medio de otras publicaciones de la organización de los testigos de Jehová incluyendo a las revistas ¡Despertad! y La Atalaya.


Presten atención a sí mismos y a todo el rebaño
http://www.oocities.org/pco1973/ks91s/

70  En los años 1989 y 1992, se suministró a los testigos de Jehová de a pie información general  sobre qué y cómo denunciar y medidas disciplinarias --como sucedió en los casos de las víctimas BCG y BCB-- en la forma del libro Organizados para efectuar nuestro ministerio (publicado en 1983).

3.2  Denunciando los abusos sexuales infantiles

Denunciándolo en el ámbito de la organización de los testigos de Jehová

71  En 1989 y 1992, los miembros de a pie de la organización de los testigos de Jehová fueron exhortados a que denunciaran [delataran] ante los ancianos los pecados graves tales como la fornicación, adulterio y homosexualidad. Una que los ancianos fueran informados del pecado, a los publicadores [miembros de a pie en la confesión religiosa] se les aconsejó "dejaran el problema en las manos de los responsables de la congregación y confiaran en Jehová para resolverlo".

72  Desde 1991, los ancianos recibieron la directiva de que cualquier persona que tuviese conocimiento de que terceras personas hubiesen cometido "mala conducta" tenían la obligación de denunciarlo de modo que se pudiera mantener limpia la congregación.

73  Los mismos ancianos estaban obligados, desde 1991, a denunciar ante el cuerpo de ancianos su propia "conducta crasa" ya que entonces no estarían cualificados para continuar en el cargo.


74  Por lo menos desde 1991, los tipos de pecados que una persona podía denunciar ante los ancianos como abuso sexual infantil incluía uno o una combinación de los siguientes:
  1. "La inmundicia incluye el tocar momentáneamente, con intención, los órganos sexuales, o acariciar los pechos. (1 Tes. 4:7,8; l Tim.5:1,2)".
  2. "La conducta relajada es desprecio alarmante y flagrante de las normas morales de Jehová. (Gál. 5:19; w83-S 15/7 pág. 31;w74-S 15/2 págs. 126, 127)".
  3. "Por.néi.a encierra el uso inmoral de los órganos genitales de por lo menos un humano (sea de manera natural o pervertida)"... e incluye "abuso sexual de niños".
75  Con respecto a porneia, el manual Presten atención a sí mismos y a todo el rebaño [edición de 1991], instruyó a los ancianos de la siguiente manera: "Los ancianos siempre deben hacer lo que sea razonablemente posible para proteger de abuso adicional a los niños; en tales asuntos sigan las instrucciones de la Sociedad [sede nacional]".


76  Según las pruebas presentadas ante la Real Comisión, no fue hasta por lo menos 1992 cuando a los ancianos se les dio la directiva explícita de que se pusieran inmediatamente en contacto con la Oficina Sucursal [sede nacional] en busca de asesoramiento si ellos recibían una denuncia sobre un presunto caso de abuso sexual a menores.

Denunciándolo ante las autoridades [seculares]

77  En 1989 y 1992, los ancianos no estaban regidos por una directiva específica ya sea sobre denunciar los abusos sexuales a menores ante la autoridad secular o siquiera animar a la víctima a que denunciase los presuntos hechos ante la autoridad seglar. De hecho, en el manual Presten atención a sí mismos y a todo el rebaño [edición de 1981], advertía a los ancianos que "por virtud del fuero de los clérigos en muchos países no es obligatorio que los ancianos denuncien ante autoridad secular al agresor o la agresión". El manual Presten atención a sí mismos y a todo el rebaño [edición de 1991] sugiere que los ancianos animen al acusado a que se denuncie él mismo ante las autoridades seculares.

78  El manual Presten atención a sí mismos y a todo el rebaño [edición de 1991] por otra parte desanima a los testigos de Jehová a que denuncien a un compañero de creencias ante la justicia secular para zanjar desavenencias personales y aconseja que tales disputas deberían zanjarse con la ayuda de los ancianos de la congregación. El no cumplir con este mandato puede resultar en la pérdida de privilegios en la congregación [pérdida del cargo]. 

La investigación y constitución de un comité judicial

79  Tanto en 1989 como en 1992, las denuncias o alegaciones de pecados [o delitos] graves tenían que ser investigadas por los ancianos para determinar si la alegación o denuncia estaba fundamentada y por lo tanto se precisaba la constitución de un comité judicial.

Los ancianos que investigan y los miembros de los comités judiciales

84  El papel que desempeña un anciano ante la denuncia de una infracción se describió en las ediciones de 1981 y 1991 del manual Presten atención a sí mismos y a todo el rebaño al tener que actuar como un juez y "reajustar", "censurar" a aquellos que están arrepentidos, o "remover [expulsar] al malhechor que no se arrepiente" de la congregación.


Presten atención a sí mismos y a todo el rebaño [1991]

Comité judicial


87  Presten atención a sí mismos y a todo el rebaño [1991] delinea el tipo de carga probatoria que se aceptaría por demostrar claramente que es necesaria la acción contra el acusado:


Presten atención a sí mismos y a todo el rebaño [1991]
89  Al menos desde 1981, si el acusado no admitía los hechos que se le imputaban, a quien formulaba la denuncia se le exigía, aún en los casos de abusos sexuales infantiles, que expusiera su acusación estando presente su agresor sexual durante las fases del proceso de  investigación y comité judicial. Tanto las ediciones de 1981 como la de 1991 del manual Presten atención a sí mismos y a todo el rebaño, se indica a los ancianos  que la razón para esto se fundamenta en "que como era el caso en el antiguo Israel" el que acusa debe estar dispuesto a asumir su responsabilidad.

[La confesión religiosa recomienda la reconciliación entre víctima y agresor sexual:

94   En el manual Presten atención a sí mismos y a todo el rebaño [1991], se instruyó a los ancianos que de lo más importante a tener en cuenta por el comité judicial a la hora de determinar la sanción que merece es "el arrepentimiento sincero por parte de individuo o la falta de este". Entre otras cosas, estaría si el individuo le ha pedido perdón al afectado por su conducta (en el caso de abusos sexuales a menores, la víctima) este sería un factor relevante a tener en cuenta para determinar su arrepentimiento. Los ancianos recibieron la directriz que "ni la gravedad del mal ni la mala publicidad determinan finalmente si la persona debe ser expulsada.

101  Los miembros de la congregación fueron apercibidos contra relacionarse o tener asociación espiritual con personas expulsadas y se menciona que es necesario hacerle el vacío a las personas expulsadas para poder disfrutar de una buena relación con Jehová.

4.1 La víctima BCB sufrió abusos sexuales a manos de Bill Neill

111  Entre 1980 y 1986 cuando BCB tenía entre 12 y 18 años de edad, ella pernoctaba en el domicilio de su amigo --y también amigo de su padre--, Bill Neill, y con la familia de éste. Bill Neill tenía el cargo de anciano en la congregación Narrogin de los testigos de Jehová en Australia Occidental. BCB asistía semanalmente a las consideraciones bíblicas impartidas por Bill Neill en el Salón del Reino de Narrogin así como en el domicilio de la familia Neill.

112  Bill Neill a BCB desaconsejó a que tuviese amigos que no fueran testigos de Jehová. BCB abandonó el instituto al finalizar la Educación Secundaria Obligatoria, alentada por la familia Neill que preferían un matrimonio o que se enrolase como predicadora de tiempo completo en lugar de que obtuviese una educación académica superior.

113  La Real Comisión escuchó cómo desde la edad de 15 años, BCB había sufrido acoso y abuso sexual a manos de Bill Neill. Bill Neill permaneció en el cargo de anciano respetado de la congregación al mismo tiempo que continuaba abusando sexualmente de BCB. A pesar de los abusos de él, BCB continuó respetando a Bill Neill y se sentía incapaz de denunciar los abusos a causa de la posición de autoridad de él en la congregación.

114  BCB relató a la Real Comisión que el cargo de Bill Neill como anciano contribuyó a que él la sometiera.

4.2  BCB revela los hechos a los ancianos de la congregación de Narrogin

115  En 1991 BCB por primera vez reveló a una conocida que había sufrido abusos sexuales a manos de Bill Neill. BCB aporta pruebas de que una semana después de revelar lo sucedido a esa persona conocida, otro anciano de la congregación de Narrogin, el Sr. Horley, se dirigió a ella para hablar sobre la conducta de Bill Neill. Lo que indicaba que la conocida había revelado al Sr. Horley lo que le había contado previamente BCB.

4.3  La respuesta de los ancianos de la congregación de Narrogin a las revelaciones de BCB

118  Al tiempo de las revelaciones de BCB, el Sr. Horley y Bill Neill eran los dos únicos ancianos sirviendo en la congregación de Narrogin. En ese tiempo, el Sr. Horley y Bill Neill se conocían desde hacía 16 años.

119  El Sr. Horley dijo a la Real Comisión que no recordaba que él hubiese hablado por su cuenta con Bill Neill sobre las revelaciones de BCB y que tanto él como el Sr. Doug Jackson --el entonces superintendente viajante-- juntos hablaron con Bill Neill durante una de las visitas periódicas del Sr. Doug Jackson a la congregación.

La reunión de BCB con el Sr. Horley y Bill Neill

120  BCB demostró que poco después de haber hablado con el Sr. Horley, éste organizó una reunión en el domicilio de la víctima entre el Sr. Horley, Bill Neill, BCB y su esposo.

121  El Sr. Horley dijo a la Real Comisión que no le era posible recordar esta primera reunión con BCB.

122  BCB demostró que durante esta primera reunión, Bill Neill hizo una serie de bromas sobre su supuesta conducta. BCB también demostró que el Sr. Horley le presionó para revelase detalles íntimos de los abusos sexuales sufridos.


Presten atención a sí mismos y a todo el rebaño [1991]

123  BCB confesó a la Real Comisión que fue muy angustioso para ella tener que hablar de los abusos sexuales sufridos en una habitación llena de hombres, incluido su agresor sexual. BCB dijo sentirse incapaz de relatar en aquella reunión todo lo sufrido a manos de Bill Neill.

La reunión de BCB con el Sr. Horley, Sr. Doug Jackson, y Bill Neill

124  BCB aportó pruebas de que el Sr. Horley organizó un segunda reunión, otra vez en el domicilio de la víctima, entre él, BCB, BCC [esposo de BCB], Bill Neill, y el Sr. Doug Jackson.

125  Como se ha mencionado anteriormente, el Sr. Horley le dijo a la Real Comisión que fue precisamente en esta reunión cuando por primera vez BCB acusa a Bill Neill.

126  BCB aportó pruebas de que durante la segunda reunión con Bill Neill éste estaba a la defensiva diciendo que ella solía vestir con ropa provocativa. Ella también demostró que en ningún momento se sintió arropada y que su credibilidad fue cuestionada por los ancianos.

127  La Real Comisión escuchó de nuevo que BCB se sintió demasiado incómoda al tener que contar a los ancianos todos los detalles de los abusos sexuales sufridos a manos de Bill Neill.

128  BCB relató a la Real Comisión que nadie le explicó el propósito de tales reuniones. El Sr, Horley dijo no recordar lo que había explicado BCB.

129  BCB explicó que después de la segunda reunión, el Sr. Doug Jackson le animó a que leyese un artículo de la revista ¡Despertad! sobre abuso sexual infantil, pero nadie le explicó a ella el efecto o la conclusión de tales reuniones o si habría consecuencia alguna para Bill Neill.

Las explicaciones del Sr, Horley sobre la investigación con respecto a la acusación de BCB

130  El Sr. Horley dijo a la Real Comisión que en ese momento, él entendió que los principios bíblicos requerían que la víctima tuviera un cara a cara con su agresor y que el procedimiento pertinente se establecía en el manual Presten atención a sí mismos y a todo el rebaño [1991].

131  El Sr. Horley reconoció que fue inadecuado exigir a la víctima un cara a cara con su agresor, pero dijo no pensar en ello en aquel momento porque él solo estaba siguiendo el protocolo. Concordó que debía de ser muy duro para la víctima de abusos sexuales relatar todos los detalles de los abusos sufridos delante de su agresor y por lo menos otros dos hombres.

132  Se reconoce que el protocolo que siguió el Sr. Horley estaba delineado en el manual Presten atención a sí mismos y a todo el rebaño [1991], el cual exigía el cara a cara entre BCB y su agresor sexual. provocando una gran angustia en BCB e impidiéndole contar todo el alcance de los abusos padecidos.

133  El Sr. Horley reconoció y para que conste, que fue totalmente inadecuado que el llevara al acusado de haber cometido los abusos sexuales al mismísimo domicilio de la víctima.

Lo aportado por el Sr. Doug Jackson sobre la investigación

134  El Sr. Dough Jakson concordó con que el propósito de tales reuniones con BCB y Bill Neill era comprobar la veracidad de las acusaciones formuladas por BCB según exige el protocolo de la organización de los testigos de Jehová.

Suficiencia de la carga probatoria


135  El Sr. Horley suministró pruebas de que ya que Bill Neill negó cualquier mala conducta intencional o cualesquier tocamientos deliberados por su parte, la normativa exigía la presentación por parte de BCB de dos o más testigos presenciales que corroborasen su relato de los hechos para que se cumpliese con las exigencias de las Santas Escritures y procediese a la formación de un comité judicial. Este era el caso aún en la circunstancia de que él no tuviese motivos para no creer las acusaciones por parte de BCB.

Nuevas revelaciones/informes

136  BCB demostró que después de la reunión del comité, el Sr. Horley la desanimó a que divulgase los abusos sufridos "por respeto a la familia de Bill Neill". El Sr. Horley dijo a la Real Comisión que se opuso a que se divulgase el asunto porque él creía que "el chisme y la especulación sobre lo acontecido podría perjudicar a BCB y su familia, así como a Bill Neill y su familia". El Sr. Horley negó que estuviese tratando de encubrir el asunto.

137  Sin embargo, el Sr. Horley reconoció que BCB pudo sentirse silenciada y sin ningún tipo de apoyo cuando él le dio la orden de que no hablase con terceras personas sobre los abusos que había sufrido.

138  BCB no recuerda en estas reuniones haber debatido con nadie la posibilidad de denunciar los hechos en una comisaría.

139  El Sr. Horley dijo a la Real Comisión que él nunca la dijo nada a BCB sobre "si ella debería o no debería denunciar ante la autoridad secular la conducta de Bill Neill". El Sr. Horley mencionó que él no consideró la posibilidad de si BCB debería o no denunciar los hechos en la policía.

140  El Sr. Horley dijo que en aquella época los ancianos tenían pocas directrices internas y protocolos sobre si debían acudir a la policía ante acusaciones como las formuladas por BCB.

4.4  Bill Neill cesa en el cargo de anciano

141 BCB le dijo a la Real Comisión que a las pocas semanas de las reuniones con el Sr. Horley y el Sr. Doug Jackson, Bill Neill fue cesado como anciano. El cese de Bill Neill en el cargo de anciano, pero no el motivo del cese, fue anunciado a la congregación.

142  El Sr. Horley dijo que la acusación de BCB cuestionó la cualificación de Bill Neill como anciano y que tanto él, junto con el Sr. Doug Jackson, recomendaron el cese de Bill Neill. El Sr. Doug Jackson también mencionó que pensaba que Bill Neill nunca más cumpliría con los requisitos bíblicos para el cargo de ancianos puesto que era culpable de inmundicia y no estaba libre de acusación.

143  BCB corroboró que después de haber denunciado los abusos sufridos a manos de Bill Neill, se esperaba de que ella asistiese al estudio de la Biblia dirigido por el Sr. Horley y celebrado en el domicilio de Bill Neill. Ella dijo que continuó viendo varias veces a la semana a Bill Neill en los servicios religiosos de la congregación.

144  BCB corroboró que se sintió sin apoyo alguno por parte de la congregación y que de hecho se le animó a que respetase a su agresor sexual.

145  El Sr. Horley dijo a la Real Comisión que él y el Sr. Doug Jackson no consideraron necesario imponer ninguna restricción específica a Bill Neill.

El informe a la sede nacional

147  En una carta fechada el 1 de febrero de 1992, el Sr, Horley y el Sr. Doug Jackson informaron a la sede nacional sobre los resultados de su investigación sobre la denuncia por parte de BCB. La carta recomendaba el cese en el cargo como anciano de Bill Neill porque tanto el Srl Horley como el Sr. Doug Jackson concluyeron que había cometido "inmundicia" en "varias ocasiones".

148  La carta de 1 de febrero de 1992 además informó de que tanto el Sr. Horley y el Sr. Doug Jackson quedaron "impresionados de la predisposición de Bill Neill en aceptar el consejo y la humildad que manifestó en todo momento" y recomendaron el que fuese nombrado de nuevo en el cargo "una vez esto se hubiese olvidado". El Sr. Horley dijo a la Real Comisión que en este respecto la carta utilizó "palabras desafortunadas" y él reconoció que "asuntos de esta naturaleza toma años, si es que alguna vez es eso posible, el que se olvide completamente".

151  La carta de 1 de febrero de 1992 también informó que "desafortunadamente hay mucha gente mundana [las personas ajenas a la confesión religiosa] que están al tanto de la conducta de Bill Neill". El Sr. Horley dijo a la Real Comisión que él había incluido una expresión de preocupación sobre la divulgación de las acusaciones por parte de BCB porque el interés de él era preservar la pureza de la congregación y estaba preocupado por la reputación del nombre de Jehová. 

152  En última instancia el Sr. Horley reconoció que él estaba más preocupado de la eficacia de Bill Neill como anciano, su habilidad para enseñar, y el correcto funcionamiento de la organización. El Sr. Horley admitió que "probablemente no estuvo" preocupado por la protección a los niños de la congregación.

4.5  Las revelaciones de BCB en el año 2012

153  En el año 2012, en una declaración escrita, BCB reveló los abusos sufridos a manos de Bill Neill a dos ancianos de su congregación local, Joe Bello y David Wood.

154  En una carta fechada el 18 de diciembre de 2012, el Sr. Bello y el Sr. Wood reenviaron a la sede nacional la declaración escrita por BCB.

155  BCB relató a la Real Comisión que en julio de 2014, cuando el Sr. Bello la visitó en su domicilio por un tema sin relación con lo sucedido, ella le dijo a él que estaba contemplando la posibilidad de denunciar ante la Real Comisión los abusos que había padecido. BCB confirmó que por esas fechas, el Sr. Bello telefoneó a su esposo --BCC-- preguntándole si BCB "realmente quiere arrastrar por el fango el nombre de Jehová".

156  El Sr. Bello admitió, se hace constancia, que se equivocó cuando le dijo a BCB aquello y que él nunca debió querer "desanimar a alguien para que no denuncie los hechos ante la autoridad secular". Se presenta además la disuasión del Sr. Bello a BCB a través de lo que le dijo a su marido [BCC] siendo una clara violación de una directiva explícita de la organización de Jehová "nunca sugerir a alguien que no debe denunciar un abuso sexual infantil a la policía u otra autoridad secular".

157  Molesta por la visita del Sr. Bello, BCB escribió una segunda carta expresando sus sentimientos provocados por los abusos sexuales padecidos. De tapadillo, en una carta fechada el 17 de diciembre de 2014, el Sr. Bello, el Sr. Wood y el Sr. Robert Boardman de la congregación local de BCB enviaron a la sede nacional [de la confesión religiosa] la segunda carta escrita por ella.

La correspondencia mantenida por el Sr. Horley con la sede nacional durante 2015

158  En una carta fechada el 6 de enero de 2015, el Sr. Horley aportó, a petición del departamento de Servicio de la sede nacional, un breve resumen de los hechos que condujeron al cese en el cargo de anciano por parte de Bill Neill "alrededor de 1993". En su carta, el Sr. Horley informó de lo siguiente: "... esto vino a ser un asunto de la palabra de ella contra la de él y no hubo ningún testigo presencial de los presuntos hechos. BCB era una atractiva hermana jovencita  y con frecuencia paseaba por su casa en pijama...". El Sr. Horley dijo a la Real Comisión que este último comentario era de hecho una observación que le hizo Bill Neill a él. El Sr. Horley admitió que dicho comentario por parte de Bill Neill "debería haber provocado una mayor alarma que la que levantó en su momento". 

159  El Sr. Horley admitió, patentemente, que un menor no puede legítimamente consentir el sufrir abusos sexuales o ser culpable de sufrirlos.

4.6  Las consecuencias en BCB por los abusos padecidos y la respuesta de la organización [religiosa]

160  BCB relató a la Real Comisión las secuelas permanentes por haber abusado sexualmente de ella Bill Neill. Dijo que los abusos cambiaron quién era ella, destruyeron su confianza, y le privaron de llevar una vida normal. BCB ya en su vida adulta seguía considerándose una víctima de Bill Neill. 

161  BCB dijo a la Real Comisión que hace diez años sufrió una crisis nerviosa y que tuvo que recibir muchísima terapia para poder sobrellevar los abusos padecidos a manos de Bill Neill. La Real Comisión escuchó el impacto que el abuso había tenido en la salud de BCB de tal manera que precisó tratamiento médico y terapéutico permanente. BCB demostró que el tratamiento médico le había costado dinero y que agradecería una indemnización si se la ofreciera la organización de los testigos de Jehová.

162  BCB dijo sentirse como si le hubieran lavado el cerebro al creer que si hablaba con gente "mundana" [las personas ajenas a la comunidad religiosa] traería oprobio sobre el nombre de Jehová. BCB dijo que, como resultado de relatar su historia ante la Real Comisión, se sintió muy culpable por haber traicionado la organización de los testigos de Jehová y por "arrastrar por el fango el nombre de Jehová".

163  BCB dijo a la Real Comisión, que en su opinión: 

  1. Los ancianos deberían haberle animado a denunciar los hechos en la policía
  2. ella no debería haber soportado en su propio domicilio el tener un cara a cara con su agresor sexual
  3. y que debería haber habido mujeres que le dieran apoyo durante el proceso. (Páginas 23-40).
     Fin de la traducción apóstata.

     Con este caso damos por terminada la esta entrada. La próxima entrega, Dios mediante, veremos el caso de una menor que sufrió abusos sexuales de su propio padre --quien tenía un cargo en la confesión religiosa--. O sea, un caso de incesto. Pero, esto es harina de otro costal y no deseo extenderme más en lo que es un artículo en un blog. Además, creo que es preciso analizar y reflexionar en el caso que hemos tratado hoy.

     En resumidas cuentas, hemos aprendido que las personas que desempeñan el cargo de ancianos [los que gobiernan las comunidades locales] dentro de la estructura de la organización de los testigos de Jehová, reciben las normativas, directrices y protocolos --en forma de manuales y cartas-- desde el Cuerpo Gobernante de los testigos de Jehová, vía la sede nacional. Esta es su Constitución, por la que se rigen los comités judiciales en su particular sistema judicial paralelo. Los ancianos carecen de autonomía. Ellos cumplen órdenes.

     Todos los miembros de la comunidad religiosa tienen la obligación --so pena de represalias-- de denunciar los pecados graves [algunos se definen como delitos en los diferentes códigos penales] ante los ancianos de la congregación. Éstos formarán un comité judicial en la trastienda del Salón del Reino, normalmente, para escuchar a las partes: víctima y acusado.

     Si el acusado no reconoce lo que se le imputa, se exige un cara a cara entre presunto agresor y víctima, delante de los ancianos. ¡En el caso de BCB, se celebra este encuentro fraternal en el propio domicilio de la víctima! Si el acusado, no reconoce los hechos y no existen dos testigos presenciales del delito, la confesión religiosa considera que no hay base y se desestima el caso. Por otra parte, si el acusado reconoce su pecado y le pide perdón a la víctima fundiéndose en una abrazo fraternal, es una evidencia fundamental de su arrepentimiento genuino... y aquí paz y después gloria. Puede que temporalmente le sustituyan del cargo, o que le retiren ciertas atribuciones. Eso sí, todo en el más absoluto secreto: la comunidad local nunca podrá saber las causas por las que el susodicho ha cesado en el cargo temporalmente. El depredador sexual sigue conservando la honra y la hacienda. Y la víctima tendrá que verle la cara y saludarle semanalmente en los servicios religiosos... además de costearse un sinfín de tratamientos el resto de su vida para poder sobrellevar el trauma sin tirarse por ningún puente por desesperación. 

     A todo esto, la sede nacional de la confesión religiosa es informada por escrito detallada y puntualmente durante el proceso, impartiendo ésta directrices al respecto. En fin, todo un despropósito. Un atropello sin contemplaciones de los derechos y sentimientos de la víctima. Un silencio cómplice que posibilita que el agresor sexual --con o sin cargo-- siga en su cristiana tarea de abusar de niños tanto dentro como fuera del ámbito de la comunidad religiosa. Así es la justicia teocrática de la Sra. Pepis de los testigos de Jehová.

     La investigación de la Real Comisión Australiana, seguirá revelándonos más detalles escabrosos cometidos en el nombre de Dios, para perjuicio de la infancia. Aborrecer en nuestro interior los abusos sexuales infantiles, mientras lavamos los trapos sucios en casa... no es ni humano, ni amoroso, ni cristiano. 

     Termino que nuestro lema preferido: lo documentamos todo, todo y todo. ¿Quién es el padre de la mentira y los eufemismos varios?